La Muerte Un Negocio En Auge

El País de la Piel de Toro

Cementerio viejo  de San Lorenzo de Tormes.

La muerte es un negocio en auge.

Madrid 19/10/2024 

El día 31 de enero salieron en los medios de comunicación la noticia de la detenciones de unos operarios en una funeraria Valenciana, por vender cadáveres a las universidades de medicina para desarrollar las plásticas con dichos cuerpos, para formar a los futuros médicos.

Siempre lo he pensado,  pero la idea se me fue de la cabeza por la información  que me llegaba por otros medios por la donación de cuerpos en vida de  personas para la ciencia.

Antes de fallecer encargan   en sus testamento, está práctica, como me lo hizo saber Adolfo un médico de Bilbao. Y gracias a este gestos  otros como fallecidos sin familiares que sus destino fuese una fosa común. Las universidades no practican las costumbres del siglo anterior de ir a robar muertos a las necrópolis.

    “Gregorio”   padecía una enfermedad rara, lo desarrolló un hombre de nuestro  pueblo en los años ochenta del pasado siglo, que tenía un considerado bocio alrededor de su cuello, y no sabían los médicos cómo se produjo las transformaciones y el estudio de esa enfermedad. Y así corría el rumor, de  que él, había donado su cuerpo una vez falleció a la ciencia, para su estudio de esta rara enfermedad que padeció desde muy joven, sin tratamiento alguno para frenar su crecimiento.

Recuerdo que mi madre quería hacer lo mismo, para que no nos costará el dinero de su sepelio. Si llegará el caso de que a nosotros nos fueran mal las cosas en esta vida, pensar que fuera para una fosa común me aterraba, o trocear su cuerpo miles de veces por estudiantes inexpertos, que se preparaban para futuros médicos/as.

Nos protegió tanto de pasar un mal rato, que no consentía que sus hijos fuéramos   ver en cuerpo presente de  algún familiar o amigo fallecido en tanatorio o entierro.

Así que el primer muerto que vi fue en Málaga en el Hospital Militar, donde en julio de 1983 dos soldados se quitaron la vida y los trasladaron al depósito de cadáveres, en la sala que el hospital destina a la autopsia, en el tercer patio. 

Luego en la noche buena de ese mismo año se encontraba una mujer velada por sus familiares, al irse los parientes sobre la 20,00 el cabo reparo que se le había olvidado meterla en la cámara, y a eso de las dos de la mañana me pidió que le ayudara pues sus compañeros los sanitarios  habían desaparecido y solo quedamos los dos de Farmacia y él, mi amigo Paco se negó, así que hice de tripa corazón y me arme de valor,  le ayudé. Me llamó la atención la cantidad de gatos que estaban merendando alrededor de la fallecida, lo tuvimos que espantar y meter el cuerpo en la cámara frigorífica.  Después, ya no recuerdo nada,  el alcohol hizo su función.

Luego vendría más muertes de mis familiares queridos, hasta ese año 2011 cuando falleció mi suegra en el hospital,  este, la trasladó al tanatorio de la Paz con la autorización de un sobrino para prepara el cuerpo presente y el correspondiente traslado al cementerio de su pueblo en Ciudad Real, una hora de estar en la sala, de espera, nos avisaron que ya estaba la difunta en la  habitación correspondiente para velar su cuerpo antes de la partida hacia la necrópolis.

Fuimos detrás de ella, hasta la depresión correspondiente y fue mi cuñado quien la vio primero y en exclamación  para la encargada de que ese cuerpo no era de nuestro  familiar,  nos pidieron perdón comprobaron el error que en unos minutos después nos pasaron para otra sala, ante  la hora estipulada para la salida al campo santo, nos fuimos para los coche mientras  esperábamos  al coche fúnebre,  me quede con la duda si  volvieron a equivocarse y meter los restos mortales de otra persona al   nicho  destinado para mi suegra. Pues un par de años antes ocurrió algo parecido en el enterramiento de un hombre en Galicia,  con él de  otra persona ajena al cortejo fúnebre familiar. 

La funeraria por equivocación cambió los muertos antes cementerio distinto, y lo más graves en comunidades distintas. 

Supongo que habrán leyes penales para este tipo de negocio clandestino que funcionaron, en anteriores siglos, con los robos de cuerpos recientemente enterrados en los cementerios.

En la práctica,  de  practicar    enfermedades que estudiaban  y curan a los vivos,  los futuros doctores en medicina con los mismos cuadros víricos o afecciones que les llevó en su muerte, y para que otros pacientes  vivos, sirvieran  para su cura, de esas mismas dolencias con las que  fallecieron ellos mismo, por sus causas. 

Cotizando en alta con el cuerpo fresco  anterior a la semana de sepultar al fallecido.

Una práctica que se llevó a cabo desde que el hombre le interesó el funcionamiento de su cuerpo, intentando explicar su compleja maquinaria.  Las trabas o sacrilegios de los estados religiosos de esas épocas oscura de  la investigación, vetada por unas mentes conservadoras y atrasadas condenando al ser humano,  en   su acortar existencia de vida,  al sufrido  paraíso terrenal del milagroso  progreso de su  sanación  genética y evolucionada  paso por  estos castigos  que nos obligaron los dioses desterrado nos  hasta este lejano de su olimpo, mundo condena  retirado lo más lejos posible de la Galaxia evolutiva de los mundos beneficiosos de paz y armonía como el alma deja su cuerpo defectuoso y viejo en  prosperidad, donde el Amor triunfa para la  penitencia mandada en el firmamento celestial, bajo su leyes incomprendidas por el mismo.

De ello nos dejó la extraordinaria obra literaria de 1888 la escritora Mery Shelley del moderno Prometeo más conocido como Frankenstein.

Pero la práctica de desenterrar muertos está penalizada ahora como en la antigüedad, como se hizo saber en la cultura milenaria Egipcia, con la profanación de los cadáveres.

Ya que ellos, a sus difuntos los embalsamaban con técnicas tan complejas y secretas que han dado un excelente resultado en la conservación de su cuerpos cuatro mil años después.

Eran tan frecuentes las Disecciones en la necropsia, “Que seguro  estoy”,  aparte de ser unos excepcionales cirujanos, también  serían unos asombrosos expertos en medicina  y fabulosos galenos, con esta prácticas con la  occisa.

Pero también algunos abusaban sexualmente de algún cadáver joven perteneciente alguna atractiva y adolescente muchacha que tuvo la desgracia de morir repentinamente joven.

Gracias a los grabados, nos llegaron para nuestros días, casos de necrofilia.  Cuando se daba el caso de la muerte de una doncella, en la antigua dinastía egipcia.

Los progenitores de la joven muchacha, no entregaban su cadáver a la morgues hasta pasado unos días, en el momento de la descomposición de su organismo.

Pues corría el rumor en las clases sociales más bajas,  que algunos miembros de dichos establecimientos funerarios en  la prácticas de embalsamar,  cometían  relaciones sexuales con los reciente cuerpos cadavéricos de mujeres y hombres.

Me preguntaba si eso podría ser, que  sentirían, al practicar sexo con alguien, que de ninguna manera cooperaba en su  causa en ese estado de total frialdad, con posibilidad de contraer algún tipo de patología bacteriana, al estar en contacto con la putrefacción.

Pero me llegó la prueba aquella siniestra noticia el 28/11/2023 en el periódico de El mundo, con la detención de un electricista que violó  unos cien cadáveres, mientras trabajaba  en un hospital de Reino Unido como personal de  mantenimiento  en sus dependencias hospitalarias..

Unos por otros incumplen las leyes más desagradables como la práctica de la Necrofilia o corrupción en el  negocio de personas que trabajan en estas instituciones oficiales o morgues privadas, con cuantiosos  beneficios gracias a los muertos.

No  recuerdo, con exactitud, que cura lo dijo?, si fue el cura Hidalgo o el Merino?,  escuchando hoy 31/1/2024 en las noticias del noticiero de mi Radio portátil, mi mente se fue a esa frase que antaño escuche quizá sea en una frase para la historia .

Comunicaban el acaecimiento con la detención de estos trabajadores de una funeraria de valencia  por la venta de cadáveres a la universidad.

Y recordando al cura revolucionario en púlpito y dirigiéndose dóciles y analfabetos feligreses, tuvo que echar mano a las eficaces parábola bíblicas, para que sus parroquianos entendieran las injusticias cometida por el Gobierno con el Pueblo y  como las veía él : *  Soy como los cerdos el estado se aprovechas de vosotros hasta después de Muertos*.

Y efectivamente surgió el efecto llamada a restaurar la injusticia  por la justicia.

  Han Solo

escrito presentado al concurso V edición relato cortos " Vence el encierro 2024" México Oda a los muertos.