Secretos Oscuros - Rete Anpe
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Capítulo III. Rete anpe. Mantente en paz
Al despertar Patrick se encontraba atado a una camilla, se llenó de pavor al recordar lo que había visto en el rito con el sirviente, su corazón comenzó a latir más rápido, trato de zafarse pero no pudo. Podía sentir el ritmo de los tambores, aunque esta vez era distinto, más acelerado. Dos esclavos lo levantaron y lo llevaron al lugar donde se llevaba a cabo la celebración. A diferencia de lo que había presenciado Patrick, esta vez no habían sirvientes, solo esclavos con su dorso descubierto pintado como esqueletos. Tampoco habían ofrendas de comida, las mujeres esclavas bailaban eufóricas como poseídas, entonces apareció el capataz Lorenzo, esta vez no llevaba máscara solo una corona hecha de huesos sobre su cabeza.
- Señor Garrett, esta tan interesado en la muerte que hoy lo ayudaré a vivir la experiencia. -
- No sé qué se propone, pero será mejor que me deje libre - replicó Patrick tratando de liberar las amarras.
A un movimiento del maestro de ceremonia los tambores pararon. Dos esclavos llegaron a la escena. Uno traía un gallo representando al hombre y el otro traía una calabaza. El primer esclavo corto la cabeza del gallo y vertió la sangre en la calabaza, Lorenzo la tomo diciendo algo en creoles, seguido hecho unas hierbas molidas y untando sus dedos en la sangre los llevo a la frente de Patrick, donde dibujo un circulo con una cruz, también dibujaría un triángulo a la altura del corazón. Finalmente le dio de beber el contenido. Los tambores volvieron a sonar como truenos en una gran tormenta, las hierbas que llevaba la poción comenzaron hacer efecto. Patrick se sentía algo mareado, veía una serie de figuras distorsionadas que se movían a su alrededor que a ratos se transformaban en verdaderos demonios, tratando de poseerlo.
- Señor Garrett, pronto se encontrará en el mundo de los espíritus - Dijo el capataz poniendo su mano sobre el triángulo dibujado en su pecho.
Patrick pudo observar como la mano del capataz se introducía en su cuerpo, horrorizado trato de moverse, pero su cuerpo no le respondía, entonces sintió una presión en su corazón, la mano del capataz lo había alcanzado y ahora trataba de detenerlo. En un último intento desesperado por liberarse lanzo un grito ahogado y perdió la conciencia.
Al recuperar la conciencia el periodista se encontraba al interior de un ataúd, hecho de madera, a través de un apertura a la altura de sus ojos, pudo observar que se encontraba en el fondo de una fosa de un poco más de un metro de profundidad. Alrededor podía distinguir a los esclavos y al capataz Lorenzo parado en el borde.
- Señor Garret, ahora esta con los espíritus, dependerá de ellos si vuelve nuevamente a la vida o no - Dijo el capataz riendo.
Entonces los esclavos comenzaron a tapar el hoyo, Patrick aun sin poder moverse, sentía como los pedazos de tierra caían sobre el cajón, algunos caían por el orificio, golpeando sus ojos. Cuando logro mover sus brazos, ya estaba completamente enterrado. Hizo fuerza sobre la tapa del ataúd, sin poder abrirla, el peso de la tierra sobre él era demasiado. Desesperado comenzó a gritar contra el capataz.
-Maldito! Sácame de aquí.-
Sentía como se quedaba sin aire, en completa oscuridad a un metro bajo tierra, completamente solo.
(Continuará)